Dios tiene cuidado de su Iglesia

Julio Bolivar
CoPastor Julio Bolivar

"Cuando ayunéis, no seáis austeros, como los hipócritas; porque ellos demudan sus rostros para mostrar a los hombres que ayunan; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Pero tu cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, para no mostrar a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que esta en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensara en público"

Dios tiene cuidado de su Iglesia. 1ª Ti 5:1-8

Dios en su inmenso amor tiene cuidado de sus hijos y de su Iglesia. Como buen Padre, está pendiente de cómo nos tratamos unos a otros; de como aquellos hombres y mujeres en posiciones de liderazgo igualmente se comportan con las demás personas; con la familia de Dios.

Pablo le da instrucciones a Timoteo de cómo tratar a las personas en la casa de Dios, en su Iglesia; considerando el contexto de la época; en donde por ejemplo a las viudas que no tenían hijos ni familia no contaban con el apoyo gubernamental ni pensiones que las ayudaran en su diario vivir.

Llamados a tratarnos con respeto y amor.

Pablo inspirado por el Espíritu Santo de Dios le escribe a Timoteo de cómo tratar al hombre y la mujer mayor en la Iglesia; con mucho respeto y amor; como lo hacemos con nuestros padres. Aunque en la vida podemos tener situaciones difíciles con nuestros padres, el Señor nos anima a tratarlos con respeto y amor. A perdonarlos si nos han ofendido o herido porque es parte de lo que nos enseñó Nuestro Señor Jesucristo.

Llama la atención el trato a los jóvenes como hermanos; y hace el énfasis en que a las jóvenes además de tratarla como hermanas; hay que hacerlo con toda pureza. Sin lascivia, sin pensamientos que no agraden a Nuestro Señor. Muchos problemas se evitarían en las Iglesias, y en los hogares también si siguiéramos esta instrucción que le dio Pablo a Timoteo. En un mundo donde cada vez se habla de abuso infantil, pedofilia y maltrato; el Señor a través de su palabra nos recuerda cómo deben comportarse los hijos de Dios.

A cuidar de la familia.

Había en los tiempos de Pablo y Timoteo el tener que cuidar de las viudas que no tuvieran ni hijos ni nietos. Pero si estas tenían hijos o familia les correspondía a estos el cuidado de la misma. Y dice la palabra “esto es algo que le agrada a Dios”. Además, explica la diferencia entre una verdadera viuda que requería de ayuda; una mujer que pone su esperanza en Dios; con oración constante. A diferencia de una viuda que vive para el placer; esta espiritualmente muerta.

Continua el texto bíblico indicando que como familia debemos cuidarnos, estar pendientes unos de otros; dice especialmente los de su propia casa. Como Iglesia debemos tener la sensibilidad de las necesidades de los hermanos en determinado momento y circunstancia. La palabra hace énfasis en ese cuidado de los que están en casa, con amor, compasión y cariño. Dice el Señor, aquellos que se niegan a cuidar de sus familiares son peores que los incrédulos; que en ocasiones a pesar de no tener a Cristo en su corazón; muestran mayor compasión que miembros de la Iglesia.

El desafío esta para tratarnos como lo dijo nuestro Señor Jesucristo “les doy este mandamiento nuevo: Que se amen los unos a los otros. Así como yo los amo a ustedes, así deben amarse ustedes” Jn 13:34.

¿Estamos tratando a los hermanos de la Iglesia con amor y respeto?

¿Tenemos cuidado de nuestros familiares en casa?

Oremos

Compartir

×

Hola!

Si tienes una petición de oración o necesitas consejería por favor escríbenos.

× Oración y/o Consejería